Las solicitudes de crédito por parte de todos los trabajadores independientes que quieren desarrollar su propia empresa, siguen siendo una misión imposible de llevar a cabo. En algunos casos, se pueden obtener sin dificultades, pero son la gran minoría. En la mayoría de los casos se presentan una gran cantidad de asuntos burocráticos que complica la situación, y hacen que se efectúen de una manera muy engorrosa.
El colectivo “Comerciantes por Alicante” confirmó que fueron denegadas una gran cantidad de solicitudes que fueron elevadas al Instituto de Crédito Oficial (ICO). El motivo principal que radica sobre esta cuestión es que la entidad pide constantemente más avales y garantías que las firmas financieras privadas. Con este panorama el crecimiento de las pequeñas y medianas compañías se ve muy afectado, y como consecuencia lo sufre la economía del país, debido a que este tipo de pymes son las que más contribuyen para poder llegar al objetivo de la estabilidad financiera que se quiere conseguir desde la crisis del 2008.
En el último tiempo hubo una nota de prensa en la cual la asociación de los comerciantes le exigió al Gobierno central que tome “medidas concretas, urgentes y precisas” para que se pueda facilitar al acceso a la financiación, ya que para poder competir en el mercado se necesita de mucho dinero que será de gran utilidad para la producción de productos relevantes que causen sensación en la población.
Una de las críticas más importantes pasó por el hecho de que para cubrir operaciones de 20.000 y 40.000 euros el autónomo tiene la necesidad de avalar con todo su patrimonio. Ese es el mayor inconveniente, por el cual las personas le dan una gran importancia. Al mismo tiempo destacaron que la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) hizo una concesión muy chica de 1.300 solicitudes.