La implementación de la nueva ley en el mundo de los trabajadores independiente causará algunas modificaciones. Más de un millón de ellos tendrá que recalcular su pensión, debido a que la situación cambió radicalmente. En el pasado, los 50 años marcaban el límite establecido para mejorar la cotización, pero la actual norma reduce ese número hacía 45. La diferencia parece escasa, pero habrá que hacer todos los cálculos nuevamente por consecuencia directa de ésto. Además, el 30 por ciento del colectivo va a tender a adaptar su base antes del primer día de abril, con el objetivo de aumentar la presentación.
El autónomo tendrá que poner manos a la obra para que esta nueva ley no lo perjudique, y en este aspecto hay que mencionar que la cantidad de ellos no es baja, debido a que hay más de 900 mil según el último informe del EPA, de trabajadores que están entre los 45 y los 49 años. La cuestión que está en juego no es poca cosa, sino que se trata de las futuras pensiones. Desde el primero de abril no se podrá cotizar por encima de 1.665 euros, que es la cuantía que determinará la pensión. Esto significa un cambio en la inversión para ese sector de la comunidad.
Vale la aclaración de que la pensión de jubilación de los trabajadores autónomos es de un 45,2% inferior a la de los trabajadores por cuenta ajena. En cuanto a las cifras hay que mencionar que los primeros cobran una prestación media de 602 euros aproximadamente, mientras que los segundos perciben un promedio de 1.100 euros al mes, según los datos que se registraron en la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA).
Montar una empresa es el camino que toman varios autónomos, debido a que esa es la mejor forma que tienen para poder tener un buen rédito económico, al tener su propia pyme.